El secreto detrás de una sonrisa verdaderamente saludable
Limpieza entre dientes: el secreto detrás de una sonrisa verdaderamente saludable
Cuando piensas en mantener una boca sana, parece ser que cepillarse los dientes debe ser la máxima prioridad. Desde luego que cepillarse los dientes dos veces al día con una pasta dental con flúor es la piedra angular para una sonrisa saludable, pero hay una acción más que realmente puede transformar la salud de tu boca: la limpieza interdental.
Si bien el cepillado de dientes es la forma más efectiva de mantener los dientes limpios, solo llega al 60 % de la superficie de los dientes. Usar cepillos interdentales para limpiar entre los espacios de los dientes es una de las cosas más fáciles e importantes que puedes hacer para mejorar la salud de tu sonrisa.
Por qué es tan importante la limpieza interdental
La placa dental se puede acumular entre los dientes donde el cepillo de dientes no puede llegar. Con el tiempo, esto puede provocar caries, inflamación de las encías y mal aliento. Para evitar que esto suceda, es buena idea utilizar un cepillo interdental como parte de tu rutina de limpieza diaria.
Un cepillo interdental es un cepillo pequeño especialmente diseñado para limpiar entre los dientes, donde un cepillo de dientes normal no llega. El uso diario de un cepillo interdental, además del cepillado regular, es una manera fácil y efectiva de mantener las encías y los dientes frescos y saludables.
Recomendamos limpiar entre los dientes todos los días, para mantener tu boca limpia y saludable.
Cuando comiences a limpiarte entre los dientes por primera vez, es posible que te duelan un poco las encías y que sangren, pero no te asustes porque el sangrado de las encías suele ser un signo de inflamación de las encías. Si no notas una mejoría en unos días, visita a tu dentista.
Elegir el tamaño correcto
Los cepillos interdentales vienen en muchos tamaños diferentes y puede ser difícil saber cuál es el más adecuado para tu boca.
He aquí algunos consejos para empezar….
Mírate en el espejo e introduce el cepillo entre los dientes, cerca de las encías. Comienza con el tamaño más pequeño y continúa hasta que las cerdas del cepillo toquen la superficie del diente y el tejido de las encías.
El cepillo debe quedar bien ajustado, pero el alambre, aunque recubierto de plástico, no debe tocar los lados de los dientes ni las encías. Nunca fuerces el cepillo en un espacio.
Una vez insertado, mueve el cepillo interdental en toda su longitud de un lado a otro unas 2 o 3 veces. Asegúrate de limpiar todos los espacios entre los dientes una vez al día.
Es probable que necesites dos o tres tamaños diferentes, o la combinación de uno o dos cepillos e hilo dental; todo depende de los espacios entre los dientes, que normalmente varían a lo largo de la boca.
Cómo usar los cepillos interdentales
Para aprovechar al máximo la limpieza interdental, todo depende de la técnica correcta. La buena noticia es que usar cepillos interdentales es relativamente fácil de aprender. Una vez dominado, es un hábito saludable que durará toda la vida.
Usa un cepillo interdental recto entre los dientes frontales Inserta el cepillo suavemente entre los dientes. No fuerces el cepillo en un espacio. Mueve el cepillo interdental en toda su longitud hacia delante y hacia atrás unas cuantas veces.
Si usas un cepillo interdental pequeño en los dientes posteriores, puedes curvar ligeramente el cuello suave. Al agregar presión con el dedo, hace que sea más fácil llegar entre los dientes posteriores. O prueba con un cepillo interdental de mango largo.
Si usa un cepillo interdental más grande en los dientes posteriores puedes mejorar el acceso entre los dientes posteriores si se curva ligeramente el alambre. El cepillo interdental durará más si no lo enderezas o dobla en otro ángulo.
